8 de Marzo de 1981 en el Estadio Vélez Sarsfield de Buenos Aires. Concierto de QUEEN.
Freddie Mercury (con acento británico): I would like to introduce a friend of yours and ours as well tonight. I´m sure you already know him: Maradona.
(el público corea Maradoooo… Maradoooo…)
Diego Maradona (con acento argentino): Bueno, quiero agradecer a Freddie y los Queen por hacernos tan feliz. Y ahora, Otro Muerde el Polvo…
(comienza a sonar el famosísimo riff de Another One Bites The Dust en el bajo de John Deacon)
Este encuentro entre las dos pasiones más grandes –la música y el futbol– se dio en el mismo año (solo un mes antes) del conflicto bélico que emprendió el Reino Unido para apoderarse de las Islas Malvinas en Argentina; por lo tanto, este momento sobre el escenario entre Maradona y Mercury ahora se considera como un símbolo de hermandad entre las dos naciones.
En 1981 el astro argentino apenas se convertía en una estrella mundial, estaba recién fichado por el Boca Juniors y era uno de los nuevos ídolos en su país, admirado por su maestría dentro de la cancha con el equipo de Argentinos Juniors y por el campeonato sub-20 de 1979 en Japón, donde anotó seis goles, dio cátedra de cómo se gambetea y alzó la copa. Faltaban unos cuantos años para que Maradona ganara TODO con el Napoli y conquistara al planeta entero con su actuación en el Mundial de México 86.
Este concierto de QUEEN fue el cierre de la gira del álbum de 1980 The Game (1), en la cual –además de Europa y Estados Unidos– se presentaron en Venezuela, Brasil y Argentina, donde ofrecieron cinco conciertos: uno en Mar del Plata, otro en Rosario y tres en la ciudad de Buenos Aires, eventos que ningún pibe y ninguna mina podían perderse, mucho menos Diego que siempre le encantó la fiesta.
También es sabido que Freddie Mercury fue fanático del soccer (como dicen los ingleses), hincha del Manchester United. De hecho, declaró que la canción We Are The Champions la compuso pensando en los Red Devils. Canción que ahora es el himno no solo del futbol sino de todos los deportes, misma que escuchó Maradona en sus muchos campeonatos con el Napoli y en el Estadio Azteca en 1986.
Para la posteridad, quedó esta fotografía tomada en el camerino, que se ha vuelto tanto un ícono de fraternidad como la estampa de dos LEYENDAS juntas. Freddie Mercury con la albiceleste y Maradona con el escudo de Gran Bretaña en su remera, como dicen los argentinos.
Lee también: Ryan Reynolds busca comprar un equipo de futbol inglés