La muerte de la princesa Diana, como se retrata en el filme francés Amélie (aunque a mí me gusta llamarle por su título completo “El fabuloso destino de Amélie Poulain”), fue de esos eventos en los que todos recuerdan dónde estaban cuando escucharon la noticia, sobre todo, los europeos.
Desde las primeras horas del 31 de agosto de 1997, los periódicos y noticieros del mundo entero reportaban exactamente lo mismo:
LA PRINCESA DIANA MURIÓ TRAS UN TERRIBLE ACCIDENTE AUTOMOVILÍSTICO.
Alrededor de la medianoche la princesa de 36 años viajaba a alta velocidad en un Mercedes S-280 después de salir del Hotel Ritz cuando el vehículo se estrelló contra un pilar en un túnel debajo del Puente del Alma en París.
Para ese entonces Diana ya se había separado del príncipe Carlos, quien todo parece que, a pesar de ostentar títulos reales y ser el heredero al trono de la corona británica, nunca será Rey porque su madre es tan inmortal como Mumm-Ra.
El motivo de la separación de la pareja Real debió ser tan común como el de cualquiera de nosotros cuando cortamos con alguien, sin embargo hay teóricos de la conspiración que argumentan que detrás de su ruptura hubo algo más turbio. Más adelante profundizaré un poco más sobre esto, por lo pronto, sigamos con la versión oficial.
Tras dejar a su esposo Carlos, la princesa Diana se consiguió un novio nuevo: el multimillonario egipcio Dodi Al-Fayed de 41 años, hijo del propietario de Harrods –el centro comercial más renombrado de Londres–, el Fullham FC –que ya juega en la Premier League– y el Hotel Ritz París, clasificado entre los más lujosos del mundo. Pero su romance duró solo un mes y medio (en las revistas del corazón lo llamaron amor de verano) porque ambos murieron en ese accidente, junto con el conductor del Mercedes, Henri Paul.
El señor Paul y el señor Fayed murieron en el acto, mientras que la princesa murió a causa de sus heridas en un hospital cercano unas horas después. El único que sobrevivió fue Trevor Rees-Jones, un guardaespaldas que acompañaba a la pareja.
Los primeros informes dijeron que Diana sufría de una conmoción cerebral, un brazo roto y un muslo cortado. Sin embargo la princesa también había sufrido lesiones graves en el pecho. Los médicos del hospital la operaron durante dos horas pero sin éxito, Diana nunca recuperó la conciencia y falleció por una hemorragia interna a las 4:53 de la mañana del 31 de agosto de 1997.
El Dr. Richard Shepherd, uno de los patólogos más importantes de Gran Bretaña, dijo que la muerte de Diana se pudo evitar con un pequeño cambio: UN CINTURÓN DE SEGURIDAD.
“Si hubiera traído cinturón, habría aparecido a los dos días con un ojo morado, quizá un poco sin aliento por las costillas fracturadas y con un brazo roto en cabestrillo. eso hubiera sido todo”
PERO ¿QUÉ CAUSÓ EL ACCIDENTE?
El conductor Henri Paul se acercó a la entrada del túnel conduciendo el Mercedes a 110 kilómetros por hora cuando el límite de velocidad era de 50 km/h. Entonces perdió el control del auto y chocó contra un pilar en medio de la carretera.
Según la declaración de las autoridades francesas después del accidente, Paul excedía el límite legal de alcohol en la sangre. Y de acuerdo a testigos presenciales hubo otro elemento involucrado en el choque: el Mercedes era perseguido por paparazzi en autos y motocicletas que buscaban una fotografía de la princesa junto a Fayed.
Recordemos que en ese entonces la princesa Diana era la mujer más famosa en el mundo. Su boda fue un show mediático que siguieron más de 750 millones de personas por televisión, mientras que su procesión fúnebre fue vista por 2,500 millones de espectadores.
Hasta hoy abundan las teorías de conspiración sobre este accidente en el que perdió la vida. Si bien son diferentes, las teorías comparten la misma tesis: ESTO NO FUE UN ACCIDENTE.
Aquí te dejo algunas de las teorías (unas más verosímiles que otras) sobre la verdadera causa de la muerte de Diana.
1. DIANA EMBARAZADA DEL HIJO DE DODI
La teoría más popular surge de la posibilidad de que Diana estaba embarazada del hijo de Dodi y que la Familia Real no pudo soportar el escándalo y mucho menos la idea de que Diana se casara con un no cristiano.
La monarquía británica no quería que el padrastro del futuro Rey de Inglaterra fuera musulmán. Para la corona inglesa, el verdadero choque de Diana y Fayed fue el de dos civilizaciones: la judeo-cristiana y la musulmana.
2. DIANA ASESINADA POR TRAFICANTES DE ARMAS
La princesa Diana se había vuelto un personaje incómodo para el establishment porque encabezaba una campaña anti armamentista alrededor del mundo, motivo que hizo enojar a los fabricantes de armas, en especial a los que hacían minas antipersonas, los artefactos explosivos que se camuflan en suelo y se activan cuando alguien los pisa. Por tanto, la muerte de Diana fue ordenada por un sector del aparato militar.
3. DIANA VÍCTIMA DE LOS CELOS
Tanto el príncipe Carlos como la Reina Isabel II no podían tolerar vivir a la sombra de Diana. La princesa era mucho más popular y querida que ellos. La prensa mundial solo se interesaba en aquella mujer sencilla y elegante a la vez, de sonrisa perfecta y declaraciones sinceras.
En repetidas ocasiones la misma Reina le pidió a su nuera que se expusiera menos ante los medios, pero nunca le dijo por qué. La teoría es que el príncipe Carlos la “quitó de en medio” para que él pudiese brillar más, cosa que no sucedió porque este señor tiene menos gracia que los piolines que manda tu tía por WhatsApp
4. DIANA SACRICIFICADA
Para entrar en la jerga conspiranoide llamémosle Illuminatis al Poder detrás del poder, también llamado Deep State (Estado Profundo); las personas que supuestamente gobiernan al mundo pero no solo a base de guerras y capital, sino también con rituales de sangre que necesitan hacerse cada cierto tiempo para satisfacer a sus dioses.
Resulta que el Puente del Alma en París –donde ocurrió el accidente de la princesa Diana– era un sitio de sacrificios paganos en la época precristiana, y que durante el reinado de la dinastía de los merovingios (de los años 500 al 751) se rendía culto a Diana, la diosa del mar, y hay quienes aseguran que la princesa Diana de Gales era descendiente auténtica de los merovingios.
Lo que la convertía en el sacrificio perfecto según estas personas amantes de los rituales que nomás andan viendo a quién matan a partir de lo que les dictan los astros o el oráculo de su preferencia.
5. DIANA EN CONTRA DE LA PEDOFILÍA
En el regreso del grupo ciberactivista Anonymous este 2020 luego de tres años de ausencia, entre otras cosas, dijeron en un tweet (que después borraron) que Lady Di había sido asesinada porque estaba dispuesta a destapar una red de abuso sexual a menores en la que estaban involucrados miembros de la familia Real, la misma red de Jeffrey Epstein.
Sabemos que el príncipe Andrés, duque de York y hermano del príncipe Carlos, sostenía una gran amistad con Epstein, razón por la que ha sido seriamente cuestionado por la prensa británica. Bajo esta teoría, con la muerte de Diana, sus secretos pedófilos no serían revelados.
Así como el asesinato de JFK en los Estados Unidos o el de Colosio en México, la muerte de la princesa Diana quedará en un mar de especulaciones mientras lamentamos la pérdida de otra figura política que prometía algo diferente a lo que estamos acostumbrados.
Me pregunto, ¿cómo sería hoy si ese accidente no hubiera pasado?