- Agua en la luna puede ser una posibilidad tras el hallazgo de la nasa
- En 2008 se examinaron muestra de la misión Apolo, encontrando restos de agua.
- En 2009 estrellaron un cohete en un cráter, obteniendo indicios de hielo de agua.
- Estos restos de actividad volcánica podrían funcionar como recurso para futuras exploraciones.
El agua en la luna puede ser una realidad. Los instrumentos de la NASA que orbitan la Luna han encontrado evidencia de moléculas de agua que se mueven y «rebotan» en el lado diurno de la órbita lunar, según un estudio pionero del Orbitador de Reconocimiento Lunar (LRO).
El increíble descubrimiento sigue las suposiciones de larga data de que la superficie de la Luna es seca e inhóspita para el agua líquida. Hasta la última década, los astrónomos solo esperaban que el agua existiera en bolsas aisladas de hielo cerca de los polos. Pero una serie de descubrimientos recientes, incluido el último hallazgo de la NASA, han desafiado la forma en que los científicos entienden la hidrología lunar. Los astrónomos ahora creen que pequeñas cantidades de agua superficial están unidas al polvo de la Luna o regolito.
Los instrumentos de la NASA que orbitan la Luna han encontrado evidencia de moléculas de agua que se mueven y «rebotan» en el lado diurno de la órbita lunar.
Estos pequeños lotes de agua varían en cantidad y ubicación y dependen de la hora del día.
El descubrimiento es emocionante porque puede ayudar a planificar mejor futuras misiones tripuladas a la Luna, con el objetivo de establecer una base de residencia permanente.
Es emocionante porque puede ayudar a planificar futuras misiones tripuladas con el objetivo de establecer en la Luna una base de residencia permanente.
Amanda Hendrix, autora principal del estudio, dijo: “Estos resultados ayudan a comprender el ciclo del agua lunar. Esto nos ayudará a conocer la accesibilidad del agua que los humanos pueden usar en futuras misiones a la Luna.
“El agua lunar puede ser utilizada potencialmente por los seres humanos para producir combustible, para blindaje de radiación o gestión térmica. Si no es necesario lanzar estos materiales desde la Tierra, eso hace que estas futuras misiones sean más asequibles».